Santo Domingo, – El Ministerio de
Turismo de República Dominicana, a través de su representación en México, ofreció
una “Noche Dominicana” en el hotel St.
Regis de la Ciudad de México con el objetivo consolidar su oferta en el
mercado. El evento, cuyo eje principal fue la gastronomía, contó con la
participación de la reconocida chef dominicana Esperanza Lithgow quién ofreció
un recorrido culinario por las diferentes regiones turísticas del país que lo
tiene todo, fusionando ingredientes típicos de la isla con la influencia
francesa, española, taínas y africanas que la caracteriza.
Con más de 40 años como profesora de cocina, la
chef Esperanza Lithgow es considerada una embajadora de la gastronomía
dominicana a nivel mundial y una fiel enamorada de la cocina de su país; razón
por la cual, a lo largo de su carrera la ha motivado a posicionar la
gastronomía tradicional dominicana como un rasgo cultural importante a nivel
mundial derivado de su influencia europea, latina y africana, y los valiosos
aportes brindados en que cada región de la isla.
El evento organizado por la Oficina de Promoción Turística de México contó
con la participación de Giancarlo Mulinelli, Director de Ventas en México para
Aeroméxico, representantes del sector hotelero y la tour operación en México y
medios de comunicación quienes fueron sorprendidos por la chef Lithgow con una
inolvidable cena de cinco tiempos que reflejó el amor por su país como un
tributo a las diversas regiones de la República Dominicana, donde cada platillo
llevó a los comensales a descubrir República Dominicana a través de sus
sabores, evocando toda la tradición y calidez de este increíble destino del
caribe.
El menú llamado “De paseo por
Quisqueya la Bella” inició con una ensalada fresca de lechuga mixta
nombrada “Sutil encanto de la Isla”, servida con mango y fresas,
acompañado de una vinagreta criolla.
El segundo tiempo permitió conocer la parte norte
del país con “Sabores de mi Cibao”, mediante el plato típico del país,
Sancocho de frijoles negros deconstruidos, ideal para disfrutar en un día
lluvioso o elevar el interés por descubrir más de Dominicana. Seguido de “Mestizaje,
nos fuimos pa´ Samaná”, un emplatado a base de pescado fresco montado
en un cremoso de chenché al coco y camarones, que, en cada bocado, dio lugar a una
fusión de mar y tierra para disfrutar de los ingredientes que la provincia de
Samaná ofrece en sus terrenos frondosos de montaña y costas con playas de arena
blanca. De plato fuerte, la chef Lithgow ofreció degustar los sabores y la “Magia
del Este con un “Chin” de Mamajuana”, un platillo conformado por un
tierno solomillo de res curado en Mamajuana (Licor típico de República Dominicana),
acompañado de muselina de papa y yuca.
“La Noche Dominicana” y sus sabores culminaron
esta espectacular muestra gastronómica con “Dulces de mi Tierra”, un postre de
coco bañado en salsa de ponche, cerezas confitadas, guanábana, piña, chocolate
y un toque de ron para darle carácter e invitar a todos los viajeros mexicanos
a descubrir República Dominicana a través de sus sabores.
En palabras de Carolina Pérez, Representante de
la Oficina de Promoción Turística de República Dominicana en México, “La
gastronomía dominicana es un reflejo de la influencia europea y africana, un
rasgo que lo asemeja con diversas regiones de Latinoamérica, pero que denota
una gran diferencia que la hace única y original por el aporte que cada región
en la isla les brinda a los platillos con sus ingredientes locales.
“La Noche Dominicana” también dio paso a degustar
la bebida típica del país que lo tiene todo, el Ron. Este clásico destilado de
caña de azúcar es parte fundamental de la experiencia para todo viajero en el
destino, que se complementa con el Puro, otro producto emblemático que los
invitados pudieron conocer a través de una muestra artesanal donde se les
mostró el proceso de elaboración que integrara todo el sabor y aroma de
República Dominicana.
De esta manera, el Ministerio de Turismo de República
Dominicana busca enamorar y motivar al mercado mexicano a descubrir desde
diferentes perspectivas, la basta oferta que el destino ofrece a sus visitantes
y hacer de su estancia, una experiencia que integre los puntos más emblemáticos
del país como son sus calles de diseño colonial en Santo Domingo, sus blancas
playas, una impresionante riqueza cultural, así como su espectacular oferta
gastronómica y de entretenimiento
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